Concepción, 03 de agosto de 2016.- Un inventario que recopila y describe aquellos productos y preparaciones que representan la identidad alimentaria de la Región del Biobío, que están vinculados a sus habitantes, su territorio, su historia y su cultura y por lo cual se han considerado como patrimoniales. Así describen sus gestores al libro “Patrimonio Alimentario de Chile: Productos y preparaciones de la Región del Biobío», publicación que fue presentada ayer en Concepción ante autoridades y actores regionales del sector agrícola, la cultura y el mundo gastronómico.
Una iniciativa que, como explica el director ejecutivo de FIA, Héctor Echeverría, se enmarca en la serie “Patrimonio Alimentario de Chile”, que ya había entregado los inventarios de Valparaíso y Arica Parinacota, y que de aquí a 2020 espera producir los libros de cada una de las regiones que integran el país.
“La alimentación es una de las expresiones culturales que distingue e identifica a un pueblo. Por ello, creemos que el rescatar el patrimonio alimentario y la tradición de uso de los productos y las preparaciones de los diversos territorios de un país, es fundamental para su valorización a través, por ejemplo, de su encadenamiento con los sectores gastronómico, turístico y cultural”, sostiene Echeverría.
La investigación del libro de Biobío estuvo a cargo de la doctora María Isabel Manzur, experta en biodiversidad, recursos genéticos y agricultura sustentable, quien explica que un producto o preparación es considerado “patrimonial” cuando cuenta con una tradición de “a lo menos cinco generaciones vinculada a un territorio y a una historia determinados”.
La profesional agrega que una de las características poco conocidas de la Región del Biobío es su rica cultura alimentaria ligada al mar, reflejada en la gran variedad de productos desconocidos en otras zonas del país, como las chuchitas, el diquive, el machuelo, los chapes, el caracol trumulco, los chanchitos de mar; peces como el rollizo, el chalaco, los pescados secos, y las preparaciones culinarias a base de estos ingredientes.
“Estudiamos un total de 314 alimentos de la región, éstos se agruparon y se seleccionaron 220 productos y preparaciones como patrimoniales. Finalmente el inventario abarcó 72 productos y 148 preparaciones”, detalla Manzur.
Durante el evento de lanzamiento, el público asistente pudo degustar algunos de estos platos, divididos en cuatro estaciones que representaron a cada una de las provincias de la región, las cuales estuvieron a cargo de destacados restaurantes como “Bendito Antojo”, “Surazo” y “Bistró Las Cabras”, además de un stand que contó con una selección de los mejores vinos del Valle del Itata.
Gastronomía patrimonial y redes comerciales
Héctor Echeverría señala que uno de los objetivos importantes de esta publicación, es el mejorar la oferta gastronómica para hoteles y restaurantes de la Región del Biobío y el mercado internacional, mostrando las posibilidades de los menús patrimoniales, y promoviendo su incorporación a los circuitos comerciales mediante un sello de calidad turístico-gastronómico.
En este objetivo, los estudiantes de gastronomía cumplen un rol fundamental, sostiene. “Si desde su formación los futuros chefs conocen el valor y las posibilidades de la cocina patrimonial, se producirá un proceso de transferencia gradual que aporte a valorar y revincularse con la historia tras los productos y preparaciones de cada región”, explica el director ejecutivo de FIA.
“Con esto, esperamos aportar al fortalecimiento de la cadena de valor de los alimentos locales, contribuyendo al desarrollo de las empresas, productores, recolectores y pescadores para proveer a los hoteles y restaurantes de la región de alimentos de calidad y poder satisfacer a los turistas que llegan a la región. Esperamos poder realizar este trabajo en todas las regiones del país de aquí a 2020”, añade Echeverría.
El libro Patrimonio Alimentario Región del Biobío, fue posible gracias a una alianza entre FIA, la consultora Austral Solutions y el Programa Chile Sustentable. Se espera que esta publicación pronto esté disponible en librerías y para ser visualizada y descargada gratuitamente en su versión digital, en el sitio web www.fia.cl.
Asimismo, cabe destacar que a este lanzamiento le sucederán los inventarios de Antofagasta, Coquimbo y La Araucanía, los cuales actualmente se encuentran en su proceso de investigación.
Ingredientes con potencial
Entre otras conclusiones, el libro Patrimonio Alimentario del Biobío, sostiene que algunos cultivos producidos en la región tienen gran potencialidad de desarrollo, como el chícharo, que es muy tolerante a la sequía; las lentejas y garbanzos, que presentan un tamaño de grano grande poco frecuente en el resto del germoplasma de estas especies; las habas moradas, el maqui y los duraznos morados, por sus propiedades antioxidantes; la papaya de Cobquecura, un producto único que podría tener indicación geográfica o denominación de origen; y el chaskú y mastuerzo, condimentos típicos de la cocina mapuche.
