En Lolol, región de O’Higgins, se realizó el encuentro que convocó a chefs, comunicadores, académicos y autoridades ligados al patrimonio y al turismo.
El pintoresco pueblo de Lolol, Monumento Nacional de Chile, fue el escenario de la II Edición del Congreso Internacional de Turismo Enogastronómico ConBoca, un evento pionero en Latinoamérica que reafirmó el valor de la ruralidad como eje de desarrollo sostenible. Bajo el lema “Vuelta a las Raíces”, el congreso congregó a productores, chefs, académicos, comunicadores y autoridades en torno a la gastronomía, el patrimonio y la innovación rural, con un énfasis en la colaboración entre territorios y la preservación de tradiciones campesinas.
UN ENCUENTRO QUE CONECTÓ SABERES Y SABORES
Organizado por la Asociación Gremial de Emprendedores Gastronómicos (ASEGMI AG) y apoyado por la agencia FIA (Fundación para la Innovación Agraria), dependiente del Ministerio de Agricultura; la Municipalidad de Lolol y Ruta de los Abastos, ConBoca 2025 destacó por su programa diverso, que combinó reflexión académica, experiencias prácticas y una feria con más de 30 expositores. Entre ellos, productores de vino campesino, quesos artesanales como Chabelita, carnes de Corderos de Pumanque y emprendimientos gourmet como Don Ignacio, quienes cautivaron al público con sus creaciones.
INNOVACIÓN QUE HONRA LAS RAÍCES
FIA tuvo un rol protagónico en esta edición, reforzando su compromiso con la integración de tradición e innovación. Adriana Bastías, representante regional de FIA en O’Higgins, destacó que: “ConBoca fue un espacio para revalorizar prácticas ancestrales, como las que impulsamos en la Ruta de los Abastos, un proyecto que conecta el agroturismo con la riqueza agroalimentaria de territorios como el secano costero en O’Higgins y que quiere replicarse en otras regiones del país”.
Las Aulas del Pensamiento, espacio impulsado por FIA, fue un escenario clave para dialogar sobre soberanía alimentaria y desarrollo territorial.
El congreso ofreció una agenda integral:
- Auditorio Central: Charlas magistrales como “Una mirada al Patrimonio” del español Juan Blánquez (Universidad Autónoma de Madrid), y debates con figuras como Julia Zuccardi (Bodega Zuccardi, Argentina) y la pastelera Camila Fiol (The Latin American 50 Best), Álvaro Barrientos (La Fuente Chilena), Tamara Bogolasky (El Borde), Sofía Bustos (Corporación Actuemos) y el viñatero Martín Villalobos.
- Aula del Pensamiento: Diálogos sobre sostenibilidad, paisajes culturales del viñedo y empoderar a los productores para crecer, con participantes como Gonzalo Rojas (UTalca), Lourdes Roldán (U. Autónoma de Madrid), Christian Bobadilla (UOH) y Marcela Reyes (Horticrece)
- Feria ConBoca: Degustaciones, un pabellón dedicado al vino campesino y tours por el casco histórico de Lolol, que atrajeron a más de doscientos visitantes.
RECONOCIMIENTOS Y PROYECCIÓN INTERNACIONAL
El evento entregó los premios Guardianes de la Memoria en tres categorías: Memoria Campesina, Memoria del Vino y Maritorio, reconociendo a quienes preservan las tradiciones locales, que en esta oportunidad recayeron en Ana María Yáñez Antillanca, Viña Cangrejo de María Iris Navarro y Jorge Cubillo, y Gisella Olguín, respectivamente. Además, contó con la participación de invitados internacionales como Bianca Mirabili (Evvai, Brasil – 2 estrellas Michelin) y Luana Sabino (Metzi, Top 50 LATAM), quienes cerraron el Congreso, compartiendo experiencias sobre turismo, alimento y territorio como encuentro virtuoso.
Pamela Villagra, directora del congreso, cerró el evento con un mensaje contundente a través de un Manifiesto del ConBoca 2025: “Reafirmamos con profunda convicción que el alimento y el paisaje cultural constituye un patrimonio vivo de enorme valor histórico, simbólico y económico, no solo para la comuna de Lolol y la región de O’Higgins, sino para toda la nación de Chile. Este paisaje es expresión de una construcción colectiva que integra naturaleza, sabores tradicionales, trabajo agrícola, vinos, vínculos comunitarios, y arquitectura rural, expresiones culturales que deben ser protegidas, visibilizadas, y proyectadas al futuro”.
El evento, gratuito y abierto al público, registró una alta participación, con inscripciones agotadas días antes de su inicio, consolidando a Lolol como referente latinoamericano del turismo enogastronómico.