Lunes 13 de julio de 2015.- Realizar un plan de acción a fin de enfrentar las brechas que aquejan hoy al sector, fue el Norte que dirigió al primer encuentro de Innovación Ovina “Aquí está la Madre del Cordero” realizado el pasado miércoles 8 de julio en la ciudad de Temuco.
Organizado por la Fundación para la Innovación Agraria (FIA) del Ministerio de Agricultura, bajo el apoyo de INDAP y la Red Nacional Ovina, la instancia convocó a más de 130 personas del sector provenientes de la producción, la academia y del gobierno, vinculadas con las regiones de O’Higgins, El Maule, Bío Bío, La Araucanía, Los Ríos y Los Lagos. ¿El objetivo? Agregarle valor a la industria, ubicando a Chile como un referente mundial de este rubro cárnico.
“Con más de 180 mil cabezas en la Araucanía en manos de más de 22 mil productores, la actividad ovina es muy importante para nuestra región. Por ello, debemos comenzar por mejorar la fertilidad de nuestros suelos y el presupuesto en la producción de forraje, a través del establecimiento de praderas permanentes que permitan manejar la producción sin dejar de lado también el abordar temas como el manejo reproductivo, sanitario y prácticas habituales de rebaño”, reconoció el seremi de Agricultura de La Araucanía, Alberto Hofer, durante su exposición en el encuentro, comprometiendo al Ministerio de Agricultura a crear, focalizar y redireccionar políticas públicas para el rubro.
En la jornada, sobresalió también el aumentar el consumo interno, por medio de innovación en la producción y campañas de promoción que desmitifiquen la imagen que hoy se tiene de la carne de cordero. “El gran desafío hoy es homologar la producción, tener una producción de una misma calidad y sin duda aumentar el consumo interno, cuyas cifras actuales son muy bajas. Para ello, debemos elaborar una estrategia que mejore su imagen, dando a conocer los altos atributos de esta carne”, señaló en su ponencia el director Ejecutivo de FIA, Héctor Echeverría, al enfatizar el escaso conocimiento que el chileno tiene del cordero. “Hoy vemos que la gente solo lo come asado y hasta longaniza de cordero se puede hacer. Es el caso de Victoria, donde sus propios productores idearon diferentes tipos de cortes. En la medida en que tengamos más puntos de venta, vamos a poder aumentar el consumo y no solo dejarlo para consumo estacional sino tratar de que tengamos la mayor parte del año cordero”, afirmó la autoridad.
Coincidió con ello Hofer, tras indicar que el consumo de carne ovina nacional actual no supera los 350 gramos por persona al año. “Esto significa que debemos idear tecnología de marketing y de entrega del producto de manera atractiva especialmente para la dueña de casa. Así tal como lo hizo el pollo, el cerdo y el vacuno, se ofrezcan distintos cortes fáciles de preparar y de almacenar, permitiendo que la gente en sus hogares prepare fácilmente carne de cordero de muy buena calidad”, sugirió. “Tenemos que informar mucho más a nuestra comunidad sobre los atributos nutritivos de la carne ovina y de que los avances genéticos en este rubro han permitido producir carnes más magras que no poseen los altos índices de grasa y colesterol que tradicionalmente se conocen. Eso otorga un producto nutritivo inocuo y sano para el ser humano”, concluyó el seremi.
Por su parte, el Ejecutivo de FIA, Igancio Briones, destacó la importancia de aumentar el capital humano experto en este rubro y el rescate patrimonial que debe existir previo a su producción. “Para agregarle valor a la producción ovina, debemos diferenciarlo desde su valor histórico o patrimonial y de que estos animales son producidos en medios ambientes amigables, lo que implica atraer a muchos consumidores especialmente a gente joven que están muy al tanto de esta materia”, explicó el profesional.
Cooperativismo
Pero, uno de los puntos más fuertes durante la jornada fue el establecer las herramientas para conseguir tales objetivos. Uno de ellos fue darle continuidad a este Encuentro por medio de una Mesa inter-regional, con miras hacia una Mesa nacional que involucre a toda la industria ovina del país, incluyendo la Región de Magallanes, principal productor local.
El otro, consistió en crear mecanismos de asociatividad que permitan a los pequeños y medianos productores ovinos a conseguir éxito en un mediano plazo. “Si bien nosotros lo convocamos, lo importante de este encuentro es que ellos tomen la iniciativa. No queremos que una vez terminado el apoyo de FIA, los proyectos se corten. Por eso, esta es una oportunidad para crear la Mesa Ovina Nacional, con sus propios comités técnicos regionales a fin de desarrollar un trabajo territorial con sus propias agendas. Así, FIA mantiene su respaldo a la innovación, mediante giras tecnológicas, la creación de sus productos y el mejoramiento genético”, destacó Héctor Echeverría. “Paralelo a ello, como FIA no queremos seguir apoyando iniciativas individuales sino proyectos que generen primero bien público, que podamos acceder a ello, pudiendo así equiparar el acceso a nuevas tecnologías. Es decir, los proyectos que se presenten de forma asociativa y que nazcan de la agenda, son los que vamos a apoyar”, aseguró el director de la Fundación.
Compromisos recibidos de buena manera por los emprendedores ovinos, quienes terminada la actividad se propusieron aumentar sus ventas en un 30% anual. “Estamos confiados que todas estas medidas tomadas, las instituciones públicas las harán llegar a los productores. Acá la gente necesita praderas, cobertizos, la agricultura familiar campesina tiene la capacidad de producir bien. Por ello debemos buscarle comercialización al cordero, sacando al consumidor de la estacionalidad acostumbrándolo a que ingiera cordero durante todo el año. Presentándole cortes gourmet que estén al alcance de quien cocine en las casas chilenas”, manifestó Adelmo Castro, presidente de la Cooperativa de Ovino de Victoria y presidente de la Mesa regional de la Araucanía.
“En la Araucanía hemos aumentado nuestra producción, ya llevamos más de 20 mil vientres solo en esta zona pero en comparación a Magallanes donde un solo productor tiene 5 mil ovejas, el panorama cambia. Toda la vida se ha producido cordero en esta zona, pero llego la hora de mejorar esa producción para conseguir cortes de buena calidad. Antes el cordero se consumía cuando ya estaba bastante crecido y hoy debe consumirse después de los 4 meses con 38 kg de peso, algo que debe ser entendido por nuestros productores a través de expertos”, concluyó Castro.