Región Metropolitana, julio de 2020.- La ganadería convencional se caracteriza por un pensamiento lineal, reduccionista. Trata de simplificar todo y la sobre-simplificación, dicen los expertos, daña la biodiversidad. En respuesta a dicha problemática del sector silvoagropecuario y la cadena de valor asociada, la Fundación para la Innovación Agraria (FIA) del ministerio de Agricultura, impulsa el desarrollo de un sitio de aprendizaje para el agro del futuro: técnicas de ganadería regenerativa – que trabaja en la recuperación de sistemas biológicos – que podrán ser aplicadas en la zona centro y sur de Chile.
Actualmente, casi la mitad (49.1%) de los suelos de Chile presentan erosión. El principal factor responsable es la acción humana, pero también hay factores intrínsecos al paisaje. Además, hay estimaciones de que cerca del 50% de la materia orgánica de los suelos se puede perder por efecto de la agricultura y ganadería convencional.
La iniciativa es ejecutada por el equipo de la Estación Experimental Agrícola Julio Ortúzar Pereira – ubicada en la comuna de Pirque – de la Pontificia Universidad Católica de Chile (Fundación Agro UC).
SOLUCIÓN
¿En qué consiste el proyecto? Se espera implementar y evaluar prácticas de tipo regenerativas adaptadas a pequeños y medianos productores de la zona central para la producción de cultivos y forrajes, y para la producción animal.
“El lugar donde desarrollamos el proyecto (Pirque) viene de décadas de cultivos y manejos convencionales, por lo que el suelo es como un enfermo que está siendo alimentado por suero o sonda: hay que ir mejorándolo de a poco, dándole las condiciones para que se recupere y luego pueda comer y por sí mismo llevar una vida activa. El proceso de transición (para su mejora) permite comenzar a recuperar el ecosistema del suelo, aumentar la biodiversidad en y sobre éste, y echar a andar los procesos biológicos que después sostendrán la nueva forma de producir”, explicó Rafael Larraín, investigador responsable del proyecto.
En esa línea, el director ejecutivo de FIA, Álvaro Eyzaguirre, sostuvo que “uno de nuestros desafíos estratégicos es considerar la biodiversidad y sustentabilidad de nuestro ecosistema, así que estamos muy contentos que, a través de nuevas prácticas para el sector, podamos permitir que la Región Metropolitana se convierta en un espacio pionero para la agricultura del futuro”.
Por su parte, el Seremi de Agricultura, José Pedro Guilisasti, agregó: “Creo que esta iniciativa tiene un gran potencial para ser replicada en la Región Metropolitana, en lugares que también sufren erosión como consecuencia de prácticas ganaderas. Como Ministerio de Agricultura y los organismos dependientes, tenemos mucho que aportar a esta iniciativa pionera, poniendo a su disposición nuestra experiencia en temas relacionados como a través del Sistema de Incentivos para la Sustentabilidad Agroambiental de los Suelos Agropecuarios (SIRSD-S), para la recuperación de suelos degradados, a través de servicios como SAG, INDAP y ODEPA”.
ACCIONES
Dicha implementación de modernas prácticas “son útiles en diversas situaciones ganaderas, incluidas la producción de leche (rubro principal en la Estación Experimental) pero utilizables en también en otros sistemas ganaderos; desde crianza y engorda de rumiantes, hasta producción de cerdos y aves. Se evaluarán opciones para la producción de maíz en rotaciones con cultivos de cobertura bajo siembra directa, y la producción estacional de cultivos de forraje/granos sobre una pradera permanente (pasture cropping). Además se evaluará la implementación de un sistema de pastoreo regenerativo con una secuencia de bovinos y gallinas de postura en gallinero móvil”, agregó Larraín.
Finalmente, también se busca desarrollar capacidades en productores, técnicos y estudiantes para aplicar estas prácticas en forma independiente, y difundir resultados productivos, ambientales y económicos de sectores con y sin manejos regenerativos»
REGENERATIVA
Según explicó Larraín, el proyecto es trascendental para la agricultura del futuro ya que la ganadería convencional se caracteriza por un “pensamiento lineal, reduccionista. Trata de simplificar todo y la sobre-simplificación lleva a problemas típicos de sistemas inestables: plagas, enfermedades, desnutrición, entre otros”.
“A través de la recuperación de sistemas biológicos complejos y activos, la ganadería regenerativa intenta trabajar con la naturaleza para recuperar los ecosistemas, fortalecer las comunidades y mejorar la rentabilidad. Para la agricultura regenerativa un suelo vivo y sano es la base para una producción vegetal abundante, sana y rentable”, añadió Larraín.
De acuerdo con los estudios que existen en el tema, la pérdida de biodiversidad y la frecuente inversión del suelo por arados y rastras destruyen el ecosistema del suelo y hacen que la materia orgánica se degrade liberando CO2. Todo esto genera un suelo menos nutritivo para las plantas; perdiendo su estructura, reduciendo su capacidad de captar agua y de retenerla, y reduciendo el flujo de aire al interior del suelo.