Marcela Verónica Carrillo Marín, en séptimo básico leyó un artículo sobre el boom de la agricultura en Chile, el que artículo identificaba los factores del éxito. También en esa época leyó un hebdomadario Francés que hablaba sobre los hogares inteligentes del futuro. Hoy trabaja en Transformación Digital para Agricultura, una disciplina poco documentada, desconocida para la gran mayoría de los agricultores, donde es necesario utilizar metodologías ágiles para probar todo lo que se va implementando, retroalimentando con experiencias de terreno. Es como un “laboratorio de metodologías” para lograr vencer la brecha digital que tiene la agricultura chilena y mundial.

• En este camino se ha encontrado con muchas barreras; la oposición a nuevas tecnologías, el desconocimiento, la brecha generacional, la barrera educacional, la falta de conectividad rural, la barrera del financiamiento y por sobre todo el paradigma del «yo no soy capaz“.

• Plantea que el trabajar con generaciones futuras es parte del terreno fértil donde es necesario abordar la gestión de cambio de la industria. Su trabajo le ha permitido no solo visualizar las tecnologías que hay en este momento, sino también prospectar las futuras, abrazando el cambio como una constante. El futuro está en incorporar tecnologías como vehículo para trabajar en la mejora continua que significa la sustentabilidad, huella de carbono y huella de agua”.

Columna de opinión en La Quinta Emprende