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“Si una empresa no es sostenible, mañana no podrá acceder a sus mercados”

  • A fin de acercar la realidad de la agroindustria y agricultores a los proveedores de tecnologías insertas en otras áreas de la economía nacional; José Andrés Gálmez Commentz, coordinador de la Unidad de Programas y Proyectos (UPP) de la Fundación para la Innovación Agraria (FIA), expuso sobre la visión y misión FIA en el webinar “Foro Mercados” de la Asociación de la Industria Eléctrica (AIE).
  • El experto respondió algunas preguntas sobre su presentación a fin de crear consciencia sobre la importancia de la innovación en el mercado del futuro. Y cómo para ello, es necesario definir el concepto clúster y cuáles son sus desafíos al momento de enfrentarse con las nuevas demandas para atender un mundo que se vuelca hacia lo natural.

– Al iniciar la presentación en el foro hablaste sobre el concepto cluster. ¿Qué es y quiénes lo integran?

– Un cluster es un grupo de empresas que trabajan interrelacionadamente con el objeto de lograr beneficios económicos a todos los eslabones de la cadena comercial en la cual están insertos.

En el caso de los agricultores y la agroindustria, ellos están insertos en un cluster que involucra a empresas proveedores de servicios y tecnologías (software, maquinarias y equipos) que permiten incrementar la productividad, reducir los costos medios y marginales, disminución de las mermas, incremento en la calidad del producto, etc, y por otro lado a empresas que entregan certificaciones, construyen infraestructura, proveen de servicios de almacenaje, mano de obra, transporte, servicios de exportación, entrega de insumos, entre otros.

 – ¿Cómo se incorpora el mercado de la agroindustria?

– Es una extensión del clúster agrícola, y que requiere adquirir sus insumos desde la producción primaria agrícola; por lo cual esta última también debe cumplir con parámetros de calidad cada vez más exigentes producto de las nuevas tendencias y empoderamiento del consumidor actual.

 SOBREVIVIR PARA SOSTENER

En este sentido, hablamos de un ecosistema agrícola. ¿Cómo se le pueda dar sostenibilidad de acuerdo con lo anterior?

– El agricultor y la agroindustria requieren para sobrevivir externalizar e innovar muchos procesos, lo cual incluye el soporte a nuevas tecnologías y desarrollos. También requieren ser exitosos en un mercado altamente dinámico, y con exigencias que van más allá de la producción industrial histórica.

– ¿Ambos presentan alguna complejidad?

– Ambos sectores requieren reducir los costos, medios de producción y generar utilidades, para lo cual se necesitan proveedores de tecnologías que faciliten los procesos, reduzcan los tiempos, y lo hagan a un precio accesible para las empresas, lo cual incluye por supuesto los costos de mantención y reparación. También deben ir hacia productos inocuos para la salud, el medio ambiente y que considere el entorno social en dónde la empresa opera. Por otro lado, la agroindustria no posee la ventaja de vender en contra estación como lo es por parte de la venta de la fruta fresca.

No es fácil, pero ese es el camino, ya que estamos ad-portas de llegar a un punto de inflexión en el cual, si una empresa no es sostenible, mañana no podrá acceder a sus mercados.

– ¿Cómo se puede lograr esto, qué pasos son necesarios?

– Lo principal es que exista un mercado interesado en el producto que estamos vendiendo, si no existe interés, no hay precio de mercado, dicho en otras palabras, la iniciativa o el producto está destinado al fracaso.

Existiendo mercado para nuestro producto, lo importante es no quedar fuera, lo cual implica que el costo medio de producción no sea superior al precio de venta, dicho de otra manera, se requiere producir a un precio lo suficientemente barato como para vender nuestro producto, y quede un excedente económico que permita la sustentabilidad del negocio al menos en el mediano plazo. Todo lo anterior bajo la premisa de cumplir con las exigencias ambientales y sociales que por supuesto encarecen los productos. Es aquí la importancia de optimizar tiempos, procesos, innovar en embalajes, mantener la capacidad productiva del suelo en el caso de un agricultor, innovar en productos, entre otros.

– Bajo esta premisa, ¿qué rol tiene la agroindustria?

– Posee un tremendo desafío en ser un abastecedor de alimentos inocuos para la población. Debe producirlos elaborados en forma sostenible al interior de su propio proceso productivo, como también en el abastecerse de productos desde los agricultores, que deben de igual forma, poseer estos mismos atributos para que no impacten en la trazabilidad esperada y exigida para cada uno de ellos.

Tiene también el desafío en producir los alimentos llamados Bio, Naturales, Eco y otras denominaciones relacionadas con características que irán paulatinamente reemplazando a los alimentos convencionales, incluidos los de consumo masivo.

– Si se pudiera visualizar las áreas de desarrollo, ¿dónde estarían los desafíos estratégicos para FIA en este sector?

Entendiendo que hay innovación en la propuesta presentada, creo que FIA debe apuntar a que los proyectos financiables tengan dos atributos importantes. En primer lugar, que el producto posea mercado – ya sea de nicho o masivo – pero que tenga una oportunidad real de ser demandado, y a un precio que sea atractivo para la empresa.

Respecto de este último punto, es importante el apoyo que podemos dar como Fundación a la innovación en nuevos productos, nuevas materias primas y nuevas combinaciones de productos entre muchos otros, como también en la reducción de costos, o sea, el hacer lo mismo pero más eficientemente. Aquí es importante también entregar herramientas al área de procesos.

El producir en forma sostenible nos permitirá seguir accediendo a los mercados desarrollados, pero ellos nos impondrán el producir bajo parámetros que nos obligan a romper varios paradigmas que aún están establecidos.

 

 

 

 

 

 

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